LA FEDERACIÓN OBREROS Y EMPLEADOS DE CORREOS Y TELECOMUNICACIONES (FOECYT) LANZÓ UN PLAN DE LUCHA ANTE LA IMPOSICIÓN UNILATERAL DE AUMENTOS SALARIALES INSUFICIENTES, SUMÁNDOSE A LA CRECIENTE OLA DE CONFLICTOS GREMIALES EN EL SECTOR ESTATAL.
Los trabajadores del Correo Argentino, representados por la Federación Obreros y Empleados de Correos y Telecomunicaciones (FOECYT), iniciarán un plan de lucha que incluye un paro total de actividades de 24 horas el próximo martes 8 de abril, en rechazo a la política salarial impuesta por las autoridades de la empresa estatal. La medida, que se complementará con asambleas en los lugares de trabajo y una movilización el miércoles 9, culminará con la adhesión al paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) el jueves 10 de abril.
El gremio, liderado por Alberto Cejas, decretó el estado de alerta tras calificar como “insuficiente” el incremento salarial del 2,7% dispuesto de manera unilateral por la empresa, frente a una inflación proyectada del 7% para el primer trimestre del año. “Cerramos el 2024 con un 80% de devaluación de nuestro salario producto de la inflación acumulada. Es inaceptable que se reemplace la negociación paritaria libre por decisiones caprichosas que no reflejan la realidad que vivimos los trabajadores telepostales”, señalaron desde FOECYT en un comunicado oficial.
La organización sindical destacó que, pese al acompañamiento brindado a las autoridades del Correo durante un período de transformaciones internas, la paciencia del sector llegó a su límite. “Hemos sido parte del esfuerzo por sostener el servicio, pero no podemos aceptar que se nos ignore en la discusión salarial y que se pretenda ajustar sobre nuestros ingresos”, afirmó un delegado gremial. Además, denunciaron que la falta de diálogo y las políticas de ajuste agravan la situación laboral, en un contexto donde los recursos operativos también escasean.
El paro del 8 de abril afectará las operaciones del Correo Argentino a nivel nacional, incluyendo la distribución de correspondencia y paquetería, aunque el gremio aclaró que se garantizarán servicios esenciales en caso de emergencia. La medida se enmarca en un creciente malestar en el sector estatal, donde otros organismos y empresas públicas también enfrentan conflictos por salarios y condiciones laborales. “El plan de lucha en el Correo es una señal clara: los trabajadores no seremos la variable de ajuste frente a las políticas económicas del gobierno”, subrayaron desde FOECYT.
La federación exigió la apertura inmediata de paritarias libres y una propuesta salarial que contemple la inflación real, al tiempo que llamó a las autoridades de Correo Argentino (CORASA SA) a retomar el diálogo para evitar una escalada del conflicto. La adhesión al paro general de la CGT, previsto para el 10 de abril, refuerza la postura del sindicato en un frente unificado contra el ajuste, consolidando la lucha de los telepostales con las demandas del movimiento obrero en su conjunto.