LA UNIÓN OBRERA METALÚRGICA, HA SOLICITADO UNA REUNIÓN URGENTE CON PAOLO ROCCA, PRESIDENTE DEL GRUPO TECHINT, EN BUSCA DE UN DIÁLOGO QUE PUEDA AYUDAR A DESBLOQUEAR LAS NEGOCIACIONES. MIENTRAS SE ESPERA UNA AUDIENCIA EL 7 DE NOVIEMBRE, LA UOM SE MANTIENE ABIERTA AL DIÁLOGO ANTES DE CONSIDERAR MEDIDAS DE FUERZA
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), liderada por Abel Furlán, ha dado un paso decisivo en la lucha por mejores condiciones salariales para los trabajadores del sector siderúrgico. En medio de un contexto económico desafiante y con las negociaciones paritarias estancadas, el sindicato ha lanzado una serie de asambleas en diversas plantas industriales. Estas asambleas tienen como objetivo mantener a los trabajadores informados sobre la situación actual y las acciones que se están llevando a cabo en la Rama 21.
Una de las principales demandas de la UOM es el rechazo contundente al techo salarial del 2% mensual propuesto por las empresas. Según el sindicato, este incremento es insuficiente, especialmente considerando el deterioro del poder adquisitivo que enfrentan los trabajadores en un entorno inflacionario. La UOM exige un ajuste más acorde a las necesidades del sector: un incremento salarial mensual del 4% en lugar del 2%. Esta cifra, argumentan, es necesaria para garantizar condiciones económicas justas y sostenibles para los trabajadores de empresas como ACINDAR, SIDERAR y SIDERCA.
En este contexto, la UOM ha solicitado una reunión urgente con Paolo Rocca, presidente del Grupo Techint y una de las figuras más influyentes en la Cámara del Acero. Para el sindicato, este encuentro podría ser un punto de inflexión en las negociaciones, ya que Rocca es visto como un referente clave que podría facilitar un acuerdo que satisfaga las demandas de los trabajadores. La UOM considera que este diálogo directo es fundamental para superar el estancamiento actual.
Tras haber agotado los plazos de la conciliación obligatoria, el sindicato se encuentra en una posición en la que puede tomar medidas de fuerza si las negociaciones no avanzan. Sin embargo, antes de recurrir a estas acciones, la UOM prefiere intentar una vez más el diálogo. La próxima audiencia programada por la Secretaría de Trabajo se llevará a cabo el 7 de noviembre, y desde el sindicato se espera que esta instancia permita un avance significativo en las negociaciones.
Es importante destacar que la situación no solo afecta a los trabajadores individualmente, sino que también tiene repercusiones en la estabilidad del sector siderúrgico en su conjunto. Un acuerdo paritario que contemple las reales necesidades de los trabajadores no solo es vital para su bienestar, sino que también puede contribuir a la sostenibilidad y competitividad de las empresas del sector.
En conclusión, la UOM se encuentra en una encrucijada donde la presión por lograr un acuerdo justo es más intensa que nunca. La posibilidad de un plan de lucha se cierne sobre el horizonte, pero el sindicato aún mantiene la esperanza de que el diálogo con Paolo Rocca y las instancias de negociación puedan conducir a un desenlace favorable para todos los trabajadores del sector siderúrgico. La situación es tensa y cada decisión que se tome en los próximos días será crucial para definir el futuro salarial de miles de empleados del rubro.