LA CGT Y SINDICATOS COMO UOM, SMATA Y ATE ENCABEZAN UN PARO NACIONAL Y MASIVAS MOVILIZACIONES EN BUENOS AIRES Y OTRAS PROVINCIAS, DENUNCIANDO PERSECUCIÓN POLÍTICA TRAS LA CONFIRMACIÓN DE LA CONDENA A LA EXPRESIDENTA.
En una reacción contundente, los principales gremios argentinos, liderados por la Confederación General del Trabajo (CGT), la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), el Sindicato de Mecánicos (SMATA) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), han convocado a un paro nacional y movilizaciones masivas en respuesta al fallo de la Corte Suprema que ratificó la condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua contra Cristina Fernández de Kirchner por la causa Vialidad. La decisión judicial, confirmada este martes 10 de junio de 2025, desató un clima de tensión política y sindical en todo el país.
Desde las primeras horas de la tarde, miles de trabajadores se congregaron en la sede del Partido Justicialista (PJ) en Buenos Aires, donde la expresidenta aguardaba el fallo. Los gremios, declarados en “estado de alerta y movilización”, cortaron accesos clave como la autopista Panamericana, el Acceso Oeste, autopista Buenos Aires-La Plata y la autopista Ricchieri, generando un impacto significativo en la circulación. “No vamos a permitir que se proscriba la voluntad popular. Esto es un ataque a la democracia”, afirmó Abel Furlán, líder de la UOM, en un comunicado que llamó a la resistencia en las calles.
La CGT, tras días de deliberaciones internas, emitió un duro pronunciamiento exigiendo “responsabilidad” al Poder Judicial y calificando el fallo como una “embestida política y mediática” contra Kirchner. Dirigentes como Sergio Palazzo (La Bancaria) y Daniel Catalano (ATE Capital) denunciaron una maniobra para “disciplinar a la oposición” y advirtieron que el paro podría extenderse si no se revierte la situación. “Con Cristina no se jode”, sentenció Catalano, reflejando el sentir de las bases.
En el Conurbano, SMATA y regionales de la CGT coordinaron movilizaciones hacia Plaza de Mayo, mientras en provincias como Santa Fe, Tucumán y Río Negro se replicaron protestas. “La Justicia actúa al servicio de los poderosos. Cristina representa al pueblo trabajador”, señaló Mario Manrique, de SMATA, quien acusó a la Corte de acelerar el fallo tras el anuncio de la candidatura de Kirchner.
El Instituto Patria y La Cámpora, junto a movimientos sociales, se sumaron a las protestas, organizando una “marcha federal” para rechazar lo que consideran una persecución política. Aunque algunos sectores de la CGT mantienen distancia con el kirchnerismo, la unidad gremial se fortaleció ante lo que perciben como una amenaza al sistema democrático.
El gobierno de Javier Milei, por su parte, activó un protocolo antipiquetes, pero la masividad de las movilizaciones complicó su implementación. Mientras tanto, Cristina Kirchner, desde el PJ, llamó a la militancia a “no bajar los brazos” y aseguró que “el pueblo no se rendirá”. Los gremios prometen mantener las medidas de fuerza hasta que se garantice “justicia para Cristina y para la democracia”.