EL EXLÍDER DE LA CGT Y REFERENTE DE CAMIONEROS, PABLO MOYANO, DA UN GIRO RADICAL EN SU CARRERA, DEJANDO ATRÁS LA ACTIVIDAD GREMIAL PARA ENFOCARSE EN SU ROL COMO PRESIDENTE DEL CLUB ATLÉTICO SOCIAL Y DEPORTIVO CAMIONEROS, QUE COMPETIRÁ EN LA PRIMERA C.
Pablo Moyano, una de las figuras más destacadas del sindicalismo argentino, anunció su retiro definitivo de la actividad gremial para dedicarse de lleno a su pasión por el fútbol como presidente del Club Atlético Social y Deportivo Camioneros. La decisión, confirmada a través de un comunicado en las redes sociales del club, marca el fin de una era en el movimiento obrero y abre un nuevo capítulo en la vida del ex cotitular de la Confederación General del Trabajo (CGT).
Moyano, hijo mayor del histórico líder sindical Hugo Moyano, comunicó su alejamiento tras meses de especulaciones sobre su futuro, especialmente después de su renuncia al triunvirato de la CGT el 22 de noviembre de 2024, motivada por diferencias irreconciliables con el sector dialoguista de la central obrera. Desde entonces, su presencia en el ámbito gremial se redujo drásticamente, y su actividad se centró en el club que preside, ubicado en Esteban Echeverría, que este año competirá en la Primera C del fútbol argentino.“Es momento de cerrar una etapa y abrazar nuevos desafíos. El Club Camioneros no es solo un equipo de fútbol, es un proyecto social que representa los valores de los trabajadores. Quiero dedicarme a hacerlo crecer y a llevarlo a lo más alto”, expresó Moyano en un video publicado en la cuenta oficial del club. En el mensaje, agradeció a los trabajadores y afiliados de Camioneros por los años de lucha compartida, pero dejó claro que su prioridad ahora es el desarrollo deportivo y social de la institución.
El anuncio no sorprendió del todo al ámbito sindical, donde ya se percibía su distanciamiento. “Hace tiempo que no lo vemos en el gremio, se llevó sus cosas y no responde mensajes”, confesó un ex aliado cercano a Moyano. Su salida de la CGT, sin el respaldo esperado de otros dirigentes para un frente combativo, y su creciente desencuentro con su padre, Hugo Moyano, quien optó por mantener al Sindicato de Camioneros en la central obrera, evidenciaron su aislamiento en el sindicalismo.
En el fútbol, Moyano parece haber encontrado un nuevo terreno para canalizar su liderazgo. Bajo su presidencia, el Club Camioneros ha ganado relevancia, no solo en lo deportivo, sino también como espacio de contención social. Recientemente, el dirigente fue noticia por recibir al campeón del mundo Thiago Almada en las instalaciones del club, en un encuentro que resaltó el rol comunitario de la institución. “El año que viene vamos a ser protagonistas en todas las actividades”, prometió Moyano en un mensaje de fin de año, dejando en claro su ambición de posicionar al club como un referente en la Primera C.
Por ahora, Moyano parece disfrutar de su nueva vida, lejos de las tensiones gremiales y más cerca de las tribunas. Entre charlas futboleras y planes para el club, el exsindicalista busca construir un legado diferente, aunque su historial asegura que seguirá siendo una figura imposible de ignorar en el panorama argentino.